Realizar un curso de inglés en el extranjero es una increíble experiencia a cualquier edad. Las ventajas de un programa de estudio en otro país son numerosas, siendo la más obvia poder aprender otro idioma mejor y de forma más sencilla.
Pero no basta con coger un avión y plantarte en Londres. Requerirá que pongas de tu parte trabajo y voluntad, equilibrando el tiempo de ocio con el de estudio.
Y nadie quiere volver a casa sintiendo que no ha aprendido nada después de invertir tiempo, esfuerzo y dinero en hacer un curso de inglés en el extranjero.
Por eso queremos darte algunos sencillos consejos para aprovechar tu experiencia internacional al máximo.
¿Cómo aprovechar tu curso de inglés en el extranjero?
1.- La actitud lo es todo.
La motivación y la ilusión con la que te enfrentes a tu programa de inglés es clave para el éxito.
Si quieres aprovechar al máximo la experiencia, deberás ponerle ganas y tratar de aprender de cada pequeño detalle.
Asume el reto de vivir y estudiar fuera con optimismo y siendo consciente de la importancia de lo que estás haciendo. Vas a aprender inglés y vas a vivir una aventura que recordarás por siempre.
Enfréntate al miedo a lo desconocido y da lo mejor de ti.
2.- Pásalo bien y disfruta.
¿Qué sentido tendría si no vivir esta experiencia? Recuerda que aprender inglés no está reñido con la diversión.
Un curso en el extranjero es la oportunidad perfecta para viajar, conocer lugares increíbles, descubrir otras culturas, hacer amigos…
Si te tomas cada día con alegría y entusiasmo, tu cerebro aprenderá más y mejor.
3.- Exprime al máximo las clases.
Tu curso de inglés en el extranjero combinará las horas de clase con el tiempo de ocio.
Y sí, es normal que quieras salir y conocer cosas, pero debes asistir siempre a las clases y prestar la máxima atención.
Esto es especialmente importante cuando estudias un año escolar en el extranjero porque tendrás que adaptarte a un sistema educativo diferente al español.
Y no vale solo con asistir, ¡tienes que participar! Toma notas, lleva los ejercicios al día, pregunta tus dudas, sociabiliza con tus compañeros…
4.- Estudia un poco cada día.
No se trata de que te pases el día estudiando, ya hemos dicho que lo importante es disfrutar. Pero si te marcas un horario y todos los días repasas lo que has hecho en clase, podrás asimilar mejor los nuevos conocimientos.
Haz los deberes que te manden y se responsable.
5.- Habla en todo momento.
El punto clave de hacer un curso de inglés en el extranjero es poder practicar el idioma las 24 horas del día.
Pierde la vergüenza y lánzate a hablar siempre que puedas. En los restaurantes, yendo de compras, preguntando direcciones… Aprovecha para interactuar con los nativos angloparlantes.
Además, lo normal es que estés alojado con una familia de acogida con la que podrás practicar en todo momento.
De esta forma mejorarás tu listening y tu speaking sin apenas darte cuenta.
Intenta no relacionarte demasiado con otros españoles o, si lo haces, intentad hablar entre vosotros en inglés. No tiene ningún sentido que te vayas al extranjero para acabar hablando en tu idioma.
6.- Aprovecha todos los recursos a tu alcance.
Presta atención a cada detalle y estímulo; pueden ser una interesante fuente de aprendizaje.
Lee los periódicos o revistas, mira programas de TV, ve al cine, lee todos los carteles que encuentres… Incluso si haces visitas turísticas o vas a algún museo, no caigas en la tentación de que te expliquen las cosas es español.
Se trata de que te sumerjas por completo en la experiencia, así que prueba a olvidarte de tu idioma lo máximo posible.
7.- No tengas miedo a equivocarte.
A todos nos da un poco de miedo, o mejor dicho vergüenza, hablar en otro idioma que no dominamos.
No te presiones demasiado con el miedo a cometer errores. Todos nos equivocamos y lo importante es aprender de los fallos.
Además, estás aprendiendo otro idioma. La gente lo entenderá y no te va a juzgar porque te equivoques al construir una frase o al usar una palabra.
Y no te enfades cuando te corrijan, porque te están haciendo un favor. Eso te ayudará a saber dónde fallas y a aprender para no repetirlo.
8.- Cuando vuelvas a casa, no te olvides de lo aprendido.
Todo curso de inglés en el extranjero llega a su fin y toca volver a casa. Pero eso no significa que debas dejar de lado el idioma. Todo lo que no se practica, se olvida, así que no desaproveches los avances que has conseguido.
Para evitar que tu inglés se oxide, sigue viendo películas y leyendo en ese idioma. Prueba a ponerte los subtítulos en inglés y ya verás como, después de lo aprendido, llegará un momento en que ni los necesites.
Otra forma de seguir practicando inglés es conservar las relaciones que has hecho durante tu estancia fuera. Hoy en día Internet nos permite mantener el contacto y sentirnos cerca de la gente aunque estemos a miles de kilómetros.
Y si has disfrutado de la experiencia, no dudes en pasar otro verano en el extranjero o, mejor aún, un año escolar entero.