Decidí participar en el programa para mejorar mi inglés, vivir una experiencia nueva y madurar, así como muchos de mis familiares incluida mi hermana y mi primo hicieron anteriormente. Elegí Irlanda por la cercanía, me permitía volver a casa en Navidades y porque ya había estado antes y el cambio no sería tan grande. Mi única inquietud era no saber la familia que me podía tocar, pero por lo demás iba mentalizado y con muchas ganas de ir. La familia con la que convivo es una señora viuda, aunque tiene bastante familia y nos reunimos todos de vez en cuando. La ubicación de la casa es muy buena, queda a cinco 5 minutos del centro del pueblo y a 20 minutos del colegio.
Durante la semana, la rutina suele ser como cualquier día de colegio en cualquier parte, te levantas, te das prisa en desayunar y vestirte para empezar el día. El recreo llega enseguida, algunas clases se harán más largas y aburridas y otras más cortas e interesantes, pero como todo. Si estudias transition year (4ºESO) como yo, te resultará mucho más fácil y también descubrirás un montón de asignaturas nuevas que no damos en España. En mi caso, el colegio es bastante grande y somos bastante pocos para lo grande que es. En el patio tenemos canchas de baloncesto y un pabellón con mini gimnasio incluido. La verdad es que es un año fácil y hay bastante tiempo para quedar con tus amigos y conocer Irlanda, ya que los viernes no tenemos clase porque no podemos hacer working experience por la situación actual.
Es una gran experiencia para mejorar el inglés, cambiar tu manera de pensar y vivir de otra forma con otras costumbres. Al principio del programa, te resultará un poco más difícil, ya que cuesta coger algunas expresiones del inglés fluido y adaptarse a tu nueva vida temporal. Pero al final, depende de la actitud de cada uno, solo hay que saber mezclarse para pillar el idioma y las expresiones. Una de las ventajas es que desde el principio ya tendrás alguien con quien juntarte.
En definitiva, ¡recomiendo mucho la experiencia!
Gabriel.
Siempre es un placer leer las vivencias de los estudiantes en otros países. En el caso de Irlanda, la gran parte de los estudiantes afirman haber tenido una experiencia muy positiva. Siempre destacan el carácter amable de los irlandeses y lo bonito que es el país.