Si ya has decidido irte a estudiar fuera, la mejor opción es convivir con una familia de acogida para aprender inglés.
En Welcome Languages apostamos por este tipo de alojamiento en nuestros programas, porque creemos que es la forma de vivir una experiencia 100% inmersiva.
Tanto si vas a estudiar un año escolar completo como solo unas semanas, convivir con una host family te permitirá aprender inglés de forma mas rápida y sencilla. Pero además, podrás disfrutar de una vivencia totalmente auténtica y que nunca olvidarás.
De hecho, la mayoría de nuestros estudiantes que se han alojado con una familia de acogida para aprender inglés, siguen en contacto con ella al pasar los años. ¡Y es que durante un tiempo serán tu propia familia!
VENTAJAS DE ALOJARTE CON UNA FAMILIA DE ACOGIDA PARA APRENDER INGLÉS
- Mejorar tu aprendizaje de forma natural. Al tener que comunicarte con la familia, podrás poner en práctica todo lo que aprendas en clase. De esta forma progresarás mucho más rápido y sin apenas darte cuenta.
- Descubrir una cultura y estilo de vida diferentes. La mejor forma de conocer un país, es vivir con una familia nativa. Podrás conocer nuevas costumbres y enriquecer tu visión del mundo.
- Tener más seguridad. Irte por primera vez al extranjero puede resultar complicado al principio. Un país nuevo, lejos de casa, otro idioma… Convivir con una host family te permitirá sentirte más seguro y protegido. Ellos cuidarán de ti y te ayudarán a adaptarte a tu nuevo entorno.
CONSEJOS PARA CONVIVIR CON UNA FAMILIA DE ACOGIDA EN EL EXTRANJERO
Lo primero que debes aceptar es que al principio todo será un poco raro. Al fin y al cabo vas a convivir con unas personas a las que no conoces de nada.
Además, cada país y cada familia tienen unas tradiciones y ritmos de vida diferentes. Por eso, queremos darte unos sencillos consejos para que la experiencia con tu familia de acogida para aprender inglés sea un éxito.
1.- SE COMUNICATIVO.
Como ya hemos dicho, tu host family querrá ayudarte a que te sientas a gusto en tu nueva realidad.
Obviamente quieren que estés cómodo en su casa y que vivas unas bonita experiencia con ellos. Pero no lo olvides, no te conocen de nada. Eso significa que no saben qué te gusta, cuáles son tus costumbres, qué te molesta…
Comunícate con ellos de forma sincera, pero con respeto.
Intenta explicarles siempre cómo pueden hacer para que te sientas mejor. Pero ojo, tampoco seas quejica. No te niegues a probar cosas nuevas y trata de dejar tus prejuicios a un lado.
Si tienes la mente abierta, tu experiencia será mucho más enriquecedora.
2.- CAUSA UNA BUENA IMPRESIÓN.
Piensa que la familia también tiene sus inseguridades con respecto a ti. Al fin y al cabo no te conocen y eso puede crearles dudas.
Querrán que te guste tu habitación, que te lleves bien con ellos, y estarán nerviosos por tu llegada.
Una buena forma de romper el hielo y causar una buena primera impresión es llevarles algún pequeño detalle de agradecimiento por acogerte.
Seguro que les hace ilusión que les lleves algún producto español, como aceite, vino o queso, con el que poder acercarse un poco a nuestra cultura.
Y durante tu estancia, esfuérzate por ser agradable y ganarte su simpatía. Sé educado y amable, colabora en las tareas de la casa (hacer la cama, poner la mesa, sacar al perro…) y trata de integrarte.
3.- ADÁPTATE A SUS COSTUMBRES Y HORARIOS.
Recuerda que eres tú el que está en otro país y en otra casa. Eso significa que debes adaptarte a las costumbres locales lo mejor posible.
Y no lo veas como un esfuerzo, sino como una experiencia positiva. Si disfrutas de las cosas nuevas, en vez de comparar siempre con lo que ya conoces, todo será más sencillo.
Tú solo observa y aprende cómo se comportan. Aunque en tu casa haya otras costumbres (o manías) no significa que sean mejores, solo diferentes.
El tema horarios es algo que siempre nos resulta chocante a los españoles cuando viajamos fuera. La mayoría de los extranjeros madrugan más, desayunan fuerte, comen ligero y cenan temprano.
Puede que al principio te cueste un poco habituarte, pero en unos días se habrá convertido en tu nueva rutina.
4.- PARTICIPA EN LAS ACTIVIDADES FAMILIARES.
Aunque vivas con una familia de acogida para aprender inglés, no significa que no puedas disfrutar de conocerles y entablar una bonita y duradera relación.
Seguro que haces muchos amigos nuevos en clase, pero no olvides también compartir momentos con tu host family. Ver la televisión con ellos, participar de sus hobbies o ir de excursión, hará que lo pases mucho mejor.
Y si además hay otros niños/jóvenes en la familia, intenta llevarte bien con ellos y hacer cosas juntos. Te ayudará a divertirte más y a no sentirte solo.
Convivir con una familia en el extranjero es una experiencia increíble. No tengas miedo, aunque haya momentos negativos, los positivos ganarán, y con diferencia.
Compartir el día a día con ellos hará que les cojas mucho cariño y que la despedida sea difícil. Por eso te recomendamos que mantengas el contacto (por tlf, mail, redes sociales), y recuerdes siempre con una sonrisa los momentos compartidos.
